Hay seguridad en los números. Y poder. E ideas. Es fácil esconderse... y encontrar una audiencia. Y a veces es simplemente divertido.
En las últimas semanas, he visto muchas formas diferentes de crowdsourcing en Facebook. Algo de humor. Algunas de ellas desgarradoras. Todo ello atractivo.
Lea más en mi blog Democrat & Chronicle.